Por Sara Avtar
Al practicar Kundalini Yoga, lo más importante para comenzar es asegurarse de que su cuerpo esté debidamente calentado y relajado. Durante 10-15 minutos antes, es bueno practicar algunos estiramientos suaves, con ejercicios que se preparen específicamente para las posiciones más desafiantes en la kriya prevista. Esto es esencial para evitar dañar tu cuerpo.
Antes de sintonizar, tómate un momento para enfocarte realmente en lo que significa el principio creativo de ‘Ong’, como el poder creativo femenino y el útero vibratorio o matriz de toda la creación (principio Shakti). Luego enfócate en lo que realmente significa ‘Guru Dev’: el sutil poder iluminador de tu ser original (y de toda la creación) que trae conciencia a todos los aspectos de tu vida (principio de Shiva). Esto te ayuda a conectarte con la energía original del mantra y no con ninguna energía distorsionada que también pueda haber estado asociada con él y que pueda infiltrarse sin darte cuenta. Cuando eso esté claro, cante con esta intención.
Cuando dirija la kriya, asegúrese de haberla practicado con suficiente antelación para conocer los desafíos y efectos de las posturas y la secuencia, viendo cómo lo estimula o lo desafía psicofísicamente. Reconoce cómo puedes acomodar eso o qué ejercicios pueden ser necesarios modificar y cómo se puede hacer eso.
Cuando demuestre los ejercicios, asegúrese de hacerlo con la dirección postural correcta y la coordinación de la respiración. Compruebe si las personas tienen problemas o necesitan apoyo para mejorar o modificar.
Aunque la regla general en Kundalini Yoga es no practicar los ejercicios cuando enseñas para que tu atención no se distraiga lejos de los estudiantes; sin embargo recomiendo co-practicar hasta cierto punto para establecer el ritmo y la modalidad de la práctica, especialmente al principio, o para ayudar a sostener al grupo con el comienzo de la fatiga. De esta forma, se puede demostrar un ritmo suave o moderado con una postura correcta, desarrollando un flujo equilibrado más autosostenido, si se trata de una postura cíclica dinámica. (Enseño sobre el flujo cíclico autosostenido más específicamente en Shakti Dance®)
Es realmente importante cultivar el hábito de prestar atención a lo que ‘sientes’ mientras practicas. Dirige tu conciencia de forma relajada a las sensaciones físicas que te producen los ejercicios, observando neutralmente dónde, cómo y por qué puedes sentir molestia o estimulación. Hacer esto te permitirá desarrollar un estado de atención y presencia meditativa mientras practicas, permitiéndote experimentar los ejercicios y sus efectos más profundamente. Es importante permanecer ‘presente’ en el cuerpo y no dejar que la mente divague o que se distraiga mientras practica. Esta es la mejor manera de asegurarte de escuchar y cuidar tu cuerpo.
Cierta incomodidad o resistencia durante los ejercicios de Kundalini Yoga puede ser causada por la fatiga muscular general y esto puede aliviarse realineando la postura, haciendo micro-movimientos, respirando conscientemente y enfocando tu atención en algo adecuado. Esto puede ayudar a liberar gradualmente la tensión de la fascia muscular y sus “bloqueos”. Hacer esto correctamente te ayudará a moverte, liberarte y experimentar una mayor ligereza. Esto no siempre es un proceso sencillo y debe hacerse con cuidado y el enfoque correcto. A menudo se puede malinterpretar o intentar con una conciencia o una capacidad postural insuficientes, en cuyo caso, “mantener el ritmo” o intentar “avanzar” puede causar daños patológicos.
La conciencia del cuerpo también debería permitir al médico sentir cuando hay alguna molestia que no se debe solo a la fatiga muscular general, sino más bien a un signo de dolor neural debido a un nervio atrapado o una lesión postural. Esto necesita ser reconocido inmediatamente y modificado apropiadamente. Por lo tanto, es importante que el maestro también instruya repetidamente a su clase sobre cómo llevar la conciencia a su cuerpo correctamente, cómo reconocer lo que sienten y cómo responder adecuadamente.
Cada persona se beneficiará de los ejercicios de forma diferente, según su enfoque. A algunos les resultará más beneficioso hacer series cortas de un ejercicio exigente con descansos intermitentes, especialmente si se trata de un ejercicio abdominal. Otros se darán cuenta de que permanecer quietos y concentrados les ayuda más (como con algunos ejercicios de brazos). Como profesor, tienes que ser consciente de los diferentes niveles y necesidades de tus alumnos, que pueden ser muy distintos, y por eso, si te unes a la práctica, no puedes perderte en los ejercicios ni distraerte de lo que ocurre en la clase.
También es importante mantener un ritmo equilibrado al guiar y moverse a través de un kriya. Las instrucciones, la duración del ejercicio, la relajación y cualquier música que lo acompañe deben estar bien coordinadas con el objetivo de respaldar cualquier beneficio que la práctica pueda ofrecer. En general, traer un enfoque meditativo a la clase será enriquecedor, apoyará a los practicantes y facilitará la sanación interior durante la práctica.
La apertura de corazón y un deseo sincero de que los estudiantes se beneficien y encuentren bienestar, en lugar de preocuparse por su propia personalidad como maestro, será el ingrediente activo que garantice que su clase se desarrolle de manera saludable.